Resulta molt suggeridor que la Geografía de Venezuela s’obri amb una dedicatòria que expressa un sentiment pregon de Pau Vila pel seu antecessor en els estudis geogràfics del país: “A la memoria insigne de Agustín Codazzi, caído ante la Sierra Nevada de Santa Marta el 7 de febrero de 1859 en cumplimiento de su misión geográfica. Su labor científica aclaró el conocimiento de la tierra venezolana por más de un siglo”. En dedicar aquesta obra magna a Codazzi se subratlla allò que Vila fa palès en el “Preliminar” del volum primer: “Para enjuiciar la tarea realizada, hay que tener en cuenta que desde 1840, la realización de Codazzi no había tenido seguidores de la importancia de aquel meritísimo geógrafo, que se hallaren además, a tono con el progreso geográfico en evolución creciente. Tan sólo Alfredo Jahn pudo ser su digno sucesor, pero dado a trabajos geográficos valiosos no alcanzó a sintetizarlos en la obra nacional que se había propuesto llevar a cabo. Había que llegar a estos años de despliegue cultural para que la necesidad de modernizar la geografía se hiciera sentir y los nuevos estudios fueran emprendidos”. (**)

Aquesta significació va ser ben percebuda pels contemporanis de Pau Vila, tant els científics com els intel·lectuals d’altres disciplines. En aquest topant destaca el judici laudatori que li va dedicar el gran poeta Carlos Augusto León: “Allí, en cortas líneas está la respuesta. Desde 1840, Codazzi no

había tenido seguidores de su talla, a tono además con el progreso científico. En realidad, repetir a Codazzi es cuanto hicieron muchos, los más de las veces en libros de texto, que en nada rebasaban la intención didáctica. Existía, por otra parte, desde luego, trabajo geográfico –o que a la geografía iba a desembocar –relativo a una región determinada, a una expedición a tierras de Guayana, al Esequibo, al Río Negro, pongamos por caso. Pero –bien se lee allí, al referirse a Alfredo Jahn– faltaba la síntesis que es, en suma, la Geografía de un país. Sin ella, tales trabajos venían a ser poco menos que piezas de un cuadro de mosaico, sueltas por aquí y por allá. Faltaba además, remozar los datos, utilizar los nuevos conocimientos y método de la ciencia geográfica. Es con relación a tales parámetros como hay que situar y evaluar la Geografía de Venezuela de Pablo Vila”. (***) [Pedro Cunill Grau: Historia de la Geografía de Venezuela. Caracas: Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior; Consejo Nacional de Universidades, 2009, volum 2, p. 563-564; versió catalana de P. Alegre (2010)]